No quiero hablar de mis gustos musicales en esta entrada, pues soy de la clase de personas de oido indefinido a la que le gusta de todo un poco, no se mucho, poco o nada sobre musica y no quisiera ofender a la gente que conoce o se jacta de saber de ello y por eso no me explayo en un intento de catedra sobre "sonidos del mundo", pero si es mas sencillo hablar (ya que es tono particular) sobre lo que mi mente relaciona con algunos ecos de la musica.
Dicen los expertos que nada puede ayudarte a recordar de manera mas vívida un pasaje de la vida que el olfato y el olor de las cosas, no voy a discrepar con ellos pues he de confesar que aun me estremezco si percibo André, Ghost, Ohm y otras aguitas de cologne; pero sensaciones que nada tienen que ver con los temblores que me produce La ventanita del amor. Mi vida es corta pero de amplio contenido musical y aunque detesto las baladas melosonas y no soy de las que suspira con las letras de Laurita Paussini muchos de mis escritos vinieron a mi mente por una cancion, de hecho empece a escribir esta suerte de diario porque CADA MEMORIA TIENE SU CANCION.
Por ahora no hay sonidos de violonchelos en mi cabeza, a decir verdad solo escucho Rolling Stone resonando I can't get no Satisfaction!!! que nada tiene que ver con lo que escribo...pero ya llegara el dia en que Ritmo Roamantica no solo logrará q me relaje, sino hasta tambien SIENTA y se apoderarán de mi los espiritus de Benny Ibarra y de Noelia y vendrá hacia a mi Illian Chester para remontarme hacia mi infancia y bailaremos La chica YEYE. Muy pronto seré del comun humano atraida por la radio, Ipod o MP3 y volveré a soñar con violines imaginarios.
Bueno con su permiso voy a cortarme las venas con mi disco de Eva Ayllon.
No pense que era amor-Pedro Suarez Vertiz Atencion a la parte de los violines
"Carla ahora no escuchas ni un ligero eco?"- Msje de texto de un amigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario